¿Qué es la rehabilitación?
La rehabilitación es aquella ciencia o arte que se encarga de proporcionar tratamiento médico a aquellos pacientes que padecen de enfermedades que afectan en forma directa o indirecta a su sistema músculo esquelético. Asimismo, constituye un proceso por el cual los pacientes tienen los medios necesarios para poder reintegrarse a la vida social luego de padecer lesiones en el sistema nervioso.
Por otra parte, se caracteriza por tratarse de una disciplina que trabaja en forma coordinada y conjunta con otras especialidades médicas a fin de brindar tratamiento integral a los pacientes.
Según la Organización Mundial de la Salud, la rehabilitación debe ser una parte esencial que se encuentre incluida en las coberturas de los servicios de salud públicos y privados, junto con todas aquellas otras técnicas o metodologías que contribuyan al bienestar de los pacientes, la prevención de nuevas patologías, tratamiento, etc. Asimismo, las estadísticas publicadas a nivel mundial exponen una realidad de 2400 millones de personas que tienen la necesidad de acudir a profesionales en esta materia a fin de mejorar su situación sanitaria.
Tipos de rehabilitación
Como parte integrante de las ciencias de la salud humana, la rehabilitación se desarrolla en las siguientes áreas de conocimiento:
1) Enfermedades cardíacas:
Realiza actividades médicas, físicas y psicológicas para la atención de pacientes que han padecido lesiones cardiovasculares, infarto del miocardio, problemas crónicos, etc.
2) Psicomotricidad:
Se destaca en el ámbito del tratamiento de niños y adultos con problemas motrices, enfermedades congénitas, pérdidas de habilidades motrices por diversas causas, etc.
3) Adultos mayores:
Contribuye a mejorar la calidad de vida de pacientes gerontológicos, ayudando a desplazarse con mayor estabilidad, corrección de posturas, prácticas de ejercicios para recuperar el movimiento o mejorarlo.
4) Deportes:
También se concentra en la recuperación de deportistas aplicando el conocimiento integrado de la medicina del deporte, urgencia médica, traumatología, etc.
5) Comunicación:
Produce mejoras en el habla, el uso del lenguaje y las formas de comunicarse luego de afecciones producidas en el cerebro.
6) Domicilio:
A través de las técnicas de rehabilitación se capacita a los familiares para mejorar el entorno en el que se mueve el paciente adaptándolo a sus necesidades y otorgándole un medio seguro de desplazamiento.
7) Capacitación:
La rehabilitación tiene una función en la enseñanza del uso de prótesis en el caso de pacientes que han perdido sus miembros superiores o inferiores, devolviéndoles una mejor calidad de vida en la adaptación a su nueva realidad. También se enseña a utilizar el bastón blanco a personas que han perdido la visión, así como también a desplazarse.
8) Psicología:
El cuidado del aspecto psicológico del paciente también se encuentra dentro de las actividades de rehabilitación, ya que contribuye a que retome sus actividades habituales acompañándolo ante el desafío de reinsertarse en la vida social luego de su enfermedad. Se trata de un acompañamiento determinante del éxito de todos los tratamientos que se realicen en paralelo.
Beneficios de la rehabilitación
La rehabilitación física permite obtener un sinnúmero de beneficios que contribuyen a mejorar la calidad de vida de los pacientes que se encuentran en la etapa de recuperación de alguna enfermedad motriz, con dificultades para el habla, etc.
Entre los principales aspectos positivos se pueden enumerar:
1) Reducción de las consecuencias de las lesiones, afecciones, traumatismos, enfermedades crónicas, etc.:
A través de la realización de los ejercicios físicos adecuados se puede mejorar las consecuencias negativas que produjo alguna enfermedad o accidente, para devolverle en alguna medida la buena calidad de vida del paciente.
2) Tono muscular:
Algunos tipos de terapias de rehabilitación permiten que se mejore el tono muscular, fortaleciéndolo para que retome en todo o en parte sus funciones habituales.
3) Movilidad, autonomía:
La recuperación total o parcial de los movimientos permiten que el paciente pueda desplazarse y realizar sus actividades habituales sin la ayuda de terceros. De esta manera se le devuelve su libertad y capacidad para autoabastecerse.
4) Corrección de problemas de tipo físico:
El uso de terapias de ejercicios y movimiento permiten que se mejore la situación de aquellos que padecen de algún tipo de trastorno motriz, contribuyendo a mejorar la precisión y estabilidad de sus desplazamientos, así como el uso de sus articulaciones.
5) Elasticidad:
El fortalecimiento de músculos y huesos hacen factible que los tendones y demás partes blandas trabajen correctamente otorgando mayor flexibilidad al realizar los movimientos.
6) Beneficios sociales:
La recuperación en la movilidad del cuerpo permite que el paciente se inserte en grupos sociales, retome sus actividades deportivas, escolares, laborales, etc. contribuyendo no sólo al bienestar de éste sino también de todos los que se relacionan con él.
7) Minimización de los efectos incapacitantes:
En este caso contribuye a la recuperación y mejora en la calidad de vida de pacientes con enfermedades cardiovasculares, cáncer, o diabetes, contribuyendo al uso de técnicas para el manejo de las situaciones de dolor.
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