Calambres musculares: Todo lo que tienes que saber

Calambres musculares: ¿Qué son?

Los calambres musculares ocurren a causa de una contracción de uno o de varios músculos de manera involuntaria y repentina. Por mayoría absoluta, son inofensivos y aunque causan dolor intenso, la recuperación es muy rápida. Salvo unas pocas excepciones, no es necesario acudir al médico, basta con poner en práctica algunos cuidados personales para que desaparezcan todas las molestias y el músculo afectado comience a funcionar como antes.

Casi siempre, los calambres musculares ocurren como resultado de la práctica de ejercicio físico o de trabajo intenso durante prolongados períodos de tiempo, más aún cuando la temperatura es alta. Determinadas enfermedades, así como ciertos fármacos, también pueden provocar calambres musculares. No obstante, por lo general no constituyen una dolencia crónica, ni tampoco un indicador de deterioro físico.

Calambres musculares: ¿síntomas?

Las piernas, y más específicamente las pantorrillas, son el lugar donde la mayoría de los calambres musculares se manifiestan. Cuando esto ocurre, se experimenta un dolor agudo y repentino y es posible que también se note a simple vista que bajo la piel se forma un abultamiento de tejido muscular.

Lo normal es que los calambres desaparezcan por sí solos, dejando una molestia que va disminuyendo hasta desaparecer. Casi nunca precisan atención médica, pero esto no significa que deban descuidarse del todo.

Calambres musculares: ¿Cuándo acudir al médico?

Lo correcto es acudir a un especialista cuando los calambres musculares causan demasiada molestia y esta tarda más de lo normal en desaparecer.

Por otra parte, es necesario visitar a un doctor si existe relación con algún cambio de coloración de la piel o si se presenta inflamación en el área afectada.

No es común que se sufran calambres musculares constantemente, ante reincidencias sí es recomendable atenderlos con ayuda experta. Asimismo, otras señales de alerta son la debilidad muscular y la ausencia de una causa evidente para su aparición (como el ejercicio intenso, el trabajo extenuante y prolongado, etc.).

Calambres musculares: ¿ cuáles son sus causas?

La razón por la que ocurren los calambres muchas veces es desconocida. No obstante, están directamente asociados con su aparición el uso excesivo de determinados músculos, la tensión muscular, la deshidratación y la exposición prologada a posiciones incómodas.

Estas son las razones más comunes por las que ocurren calambres musculares, pero también existen casos donde la causa puede estar directamente relacionada con alguna enfermedad no diagnosticada, como las siguientes:

1.- Inadecuado suministro de sangre:

Cuando las arterias encargadas de llevar sangre a las piernas presentan angostamiento pueden causar un dolor bastante similar al de los calambres musculares durante la práctica de actividades físicas. Normalmente estas molestias por arterioesclerosis de las extremidades desaparecen una vez terminado el ejercicio o la actividad física

2.-Nervios comprimidos

También se producen dolores muy similares a los calambres cuando los nervios en la espina dorsal se encuentran comprimidos (estenosis lumbar). En estos casos, las molestias se agudizan al caminar durante mucho tiempo.

3.-Carencia de minerales

Mantener una dieta saludable es fundamental para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Tanto, que el bajo consumo de alimentos con potasio, magnesio y/o calcio en nuestra dieta propician la aparición de los calambres en las piernas.

Por otra parte, es importante tener en cuenta que muchos de los medicamentos recetados para el control de la presión arterial pueden hacer que disminuya la presencia de estos minerales en nuestro organismo.   Este, sin duda, es otro motivo para mantener una dieta saludable, enfatizando en los alimentos que contienen estas sustancias o incluso tomando suplementos, si llega a ser necesario.

Calambres musculares ¿ cuáles son los factores de riesgo?

Existen varios factores de riesgo que aumenta la posibilidad de padecer calambres en las piernas. Los más usuales son:

1.-La edad:

Está comprobado que con la pérdida de la masa muscular, producto del paso de los años, las personas se vuelven más propensas a sufrir calambres. Esto ocurre, porque el músculo restante debe hacer un mayor esfuerzo para mantener el cuerpo en movimiento.

2.-La falta de hidratación:

 El ejercicio de alta exigencia, así como los climas cálidos, hacen que el organismo se deshidrate con rapidez y se encuentre más vulnerable a padecer lesiones musculares

 3.- El embarazo:

 Los cambios que se producen en el cuerpo producto de la maternidad, así como el aumento de las exigencias físicas durante este período, también son factores de riesgo.

4.- Algunas enfermedades crónicas:

Los pacientes con diabetes, trastornos hepáticos, nerviosos y tiroideos sufren calambres con mayor frecuencia.

¿Cómo prevenir los calambres musculares?

Aunque en la mayoría de los casos los calambres musculares no son padecimientos graves, resultan dolorosos y molestos y lo mejor es prevenirlos. Para ello, se recomienda mantener los niveles correctos de hidratación, tomando abundante agua al realizar ejercicios.

Además, es imprescindible seguir una dieta saludable para garantizar que el organismo no tenga carencia de minerales y realizar actividad física moderada de manera regular. Por último, pero no menos importante, es imprescindible realizar el calentamiento adecuado antes de entrenar y hacer estiramientos antes y después del ejercicio físico.